Árboles con alma


Mi abuelo, ilustre abogado y popular poeta costumbrista altoaragonés, publicó en 1935 una poesía en homenaje a los árboles dedicada a los niños. Se trataba de un poema sencillo, pedagógico, amable: a continuación transcribo la primera estrofa:

"La cuna en que nuestra madre / nos mece en la edad primera, / la lumbre de los hogares / de las risueñas aldeas, / el techo que nos cobija, / los muebles que nos rodean, / las flores que nos perfuman, / los frutos que nos sustentan, / los libros en que estudiamos / y el arca en que nos entierran; / son producto de los árboles / que véis crecer por doquiera" ...

Pues bien, el objeto de este blog es unirme a ese homenaje y dar a conocer los árboles ya que no con versos míos, con fotografías mías... Y con poemas acerca de los árboles de autores consagrados. Por cierto, el resto de la poesía de mi abuelo podéis leerlo en la entrada "Los árboles" de este blog.

sábado, 26 de agosto de 2017

Ciprés de los pantanos (Taxodium Distichum)

El  Ciprés de los pantanos también llamado ciprés calvo es una conífera bien notable. Se encuentra a gusto en ambientes pantanosos y lacustres. Esta fotografía que veis no es de Louisiana o de Florida, aunque lo parece... Es de Barcelona, del lago del parque de la Ciudadela... Atrás, hay abundante flora tropical: palmeras sobre todo... Pero delante, dentro del lago, están nuestros "taxodios". Más grandes a la izquierda y a la derecha y de mediano tamaño por el centro... El mayor es el de la izquierda, ¡gran ciprés calvo!. En el lago, cantidad de patos... y otras aves acuáticas.



                                          Aquí  lo tenemos. Son árboles caducifolios,  de gran empaque: suelen llegar a los 40 metros de altura; no es nuestro caso   por el momento                                                                                                                                                 Árboles originarios de La Louisiana,  de  las orillas del Misisipi, de Carolina del  Sur, de Texas...                                                                                                       Una de las pocas coníferas capaces de vivir dentro del agua. Y una de las pocas coníferas caducifolias, es decir, que pierden sus hojas cada año.
Y, en efecto, vemos ahora el estado invernal de otros tres cipreses calvos, situados éstos en la laguna del jardín de "Can Vidalet", en Esplugas del Llobregat. Ciertamente son taxodios mucho más jóvenes que los de La Ciudadela... pero preciosos y llamativos en Primavera. Fijaros en lo grueso de la parte baja de su tronco.



                                                                                                             Este es otro de los grandes  "taxodios" del parque de La  Ciudadela.                                                                                      Son árboles  de porte piramidal, majestuoso         simétrico, y    con ramas         horizontales.                                                                                 Lo más característico de esta especie es lo ensanchado de la base de su tronco -lo cual asegura su estabilidad-  y , más aún, la presencia de numerosas "raíces aéreas" que  sobresalen de la superficie del agua hasta un metro o más; ¡buscan el aire libre!: se llaman "pneumatóforos" y ¡colaboran en la oxigenación del árbol!                                                                                                               Aquí podemos observar esa gran base del tronco de este ciprés calvo; gran base constituida en muy buena parte por las raíces aéreas que surgen junto al tronco; a la izquierda en la fotografía. Ciertamente es un ambiente muy estimado por todo tipo de patos: 


Y muy notables pneumatóforos  los de este otro taxodio. Son tan notables  que dudo si serán simples pneumatóforos o si se confundirán con formaciones pétreas anteriores...: los expertos tendréis que dictaminar...




                                                                               Tronco: derecho, columnar, ramificado, con un cierto aire de "candelabro".                                                                                                            Troncos con corteza fibrosa, de color pardo, casi rojizo, con largas hendiduras verticales poco profundas.                                                                    La madera de estos troncos es de gran calidad, muy duradera, de color rojo oscuro. Se ha utilizado para construcción a la intemperie, para ebanistería, para construcción de buques, etc: en resumen, una madera muy estimada.                       

Es un árbol que vive en medios acuáticos y también en terreno firme. Aquí vemos, por ejemplo, uno de los ejemplares plantados en el precioso jardín de una importante entidad financiera del Vallés: 


Las hojas de los cipreses calvos son aciculares, agudas, pero no punzantes. Miden, aproximadamente un centímetro o un centímetro y medio de longitud, por un milímetro de anchura. Son lanceoladas, de consistencia flexible.


El follaje es verde claro en primavera, tanto por el haz como por el envés. Las hojas en verano amarillean y viran al rojizo en otoño. En cualquier caso, como podéis ver, son colores limpios, atractivos.


Los frutos son las clásicas  piñas de los cipreses, los "gálbulos"; de color verde claro al principio, algo azulados después, y al fin rojizos, según van madurando. Con cortos pedúnculos o sin ellos: aquí vemos algunos de ellos; son muy numerosos. Son globosos u ovoides. Están formados con 18 o 20  escamas de peculiar relieve.



                                                                                   Una segunda variedad de los Taxodiums  es la denominada "Taxodium distichum imbricatum", distinta de la clásica "Taxodium distichum distichum", que hemos visto hasta ahora.                                 

                          El árbol de la izquierda es un clásico ejemplar de esa especie o variedad                                                                                                                                                       Hay autores que prefieren condiderar que más que de una variedad se trata de otra  especie  que denominan "taxodium ascendens"        
                                                   
Este es el ejemplar de la fotografía anterior  fotografiado desde el ángulo opuesto:

                    

Se trata de un árbol relativamente joven plantado en Can Borni, en la falda de Collserola, en Barcelona. Estos árboles suelen ser más bajos que los "distichum distichum". Tampoco huyen del agua pero, de ordinario, apenas generan pneumatóforos. Proceden también del sudeste de los USA.                                                                              




                                                                 Ese es el tronco de este árbol: derecho, de buena madera, con una corteza marcada por estrias horizontales no muy profundas...
Muy distintas de las hojas de los "Taxodium distichum distichum" son las de los "Taxodium distichum imbricatum". En efecto:  son más pequeñas (miden entre 3 y 10 milímetros), aciculares o lineales muy estrechas; son hojas que se ajustan a los brotes jóvenes. A la vez esos brotes son largos, curvos...: el resultado es un follaje muy particular, original, poco común, como aquí vemos:


Especie monoica (con flores masculinas y femeninas separadas en el mismo árbol). Flores en inflorescencias colgantes: las masculinas acaban en racimos cortos y apretados, de color que tiende al rojizo: En principio vemos aquí alguna de esas inflorescencias masculinas. 


Los gálbulos de los "distichum imbricatum" no se diferencian sensiblemente de los de los árboles  "distichum distichum": gálgulos que como aquellos alojan dos semillas aladas debajo de cada escama.

Vamos terminando contemplando de nuevo uno de los cipreses calvos del lago de La Ciudadela


Y aquí la orilla del lago que desde luego invita a unos paseos muy amables, familiares...:



Como es lógico está aumentando mucho el número de parques y jardines que se enriquecen con "taxodios", allí donde es posible...


1 comentario:

  1. Extraordinario esta especie de ciprés, yo también fotografié los que hay en el Parque de la Ciudadela de Barcelona.
    Un abrazo, amigo Pedro.

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